Como siempre, luego de fumar algo, fui a comprar cosas para el bajón.
LLego al kiosco de la u, saco las cosas que se me antojan, y le pregunto a la tia cuanto es, y ella muy amablemente, empieza a sumar y me dice "a veeer, son 6, 7, 8, 10"
Yo en mi volá me rio, por lo buena onda de la señora que me tira la talla, claro, se saltaba el 9 para decir el 10! , asi que le paso una luca con una sonrisa gigante. "Gracias!" le digo, y me voy.
-¡tu vuelto!- me grita.Yo impactada, me devuelvo y le recibo el vuelto, y me voy tratando de enender por qué tenia vuelto. Claro, ella jamás me tiro una talla, ella dijo que tenia que pagar 8-10, $810 pesos!
A veces el pensar en su volá que todo el mundo es feliz y tira tallas y risa y amor, nos juega en contra.
2 comentarios:
solecilla... yo te comprendo... la gente piensa ke uno porke esta en la u le puede ayudar a sumar o algo asi, o que anda siempre alerta y atento... no, eso no pasa.
y la gente es como la caca sole!
somos las peores hippies! jajajaja
volà o no volà me complica q las viejas del negocio pidan ayuda con sumar, yo no se hacer eso!!!
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